Una tibia película con mensaje. Una de suspenso sin tanto suspenso. Una de miedo que promete terror y asusta poco. Una trama que deja una idea dando vueltas por la cabeza.
La isla siniestra es un film que no será recordado por mucho tiempo. Tampoco por poco: difícilmente sea recordado. Con una idea de guión demasiado poco creíble, quedan muchas puntas sin unir en esta soga que nunca se extiende por completo. Muchos nudos enriedan la pantalla.
Leonardo Di Caprio intenta dar credibilidad. No lo ayuda la historia, tampoco lo ayuda su talento. Sólo queda para la reflexión cierta incógnita en el final, cuando se abre la puerta de la duda sobre el personaje principal: ¿Está loco y sufre de delirio o hay una confabulación en su contra para volverlo demente?
Sería, ni más ni menos en el traspaso a la vida real, la eterna broma de si los locos están adentro o afuera. Quien esté libre de pecados que arroje la primera piedra.
viernes, 16 de abril de 2010
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ufa, con esto que lei ni me gasto en ver la peli jajajajaja..
ResponderEliminarY te dejo regalito...: "del loco es el mundo de los sueños, del cuerdo es el mundo del terror"
beso
Justo ayer vi la película, y como soy bastante maricona, por momentos me mantuvo asustada (cosa que de por sí ya me hacía dudar en ver o no la película).
ResponderEliminarLa historia me gustó, pero me quedé esperando una vuelta de tuerca final. Faltó el golpe maestro...
Besos
no entendiste nada, nene!
ResponderEliminarla historia pasó de verdad, era lo que solían hacer en la epoca del macartismo americano (si lees un poco de historia de la época la vas a cazar mejor). besos