Esa esquina oscura hoy está demasiado iluminada. "Gran inauguración", dicen unos carteles rojos con dibujos como si fueran moños.
Aquella pinturería sin clientes mutó por un Farmacity multicolor. De remedios a chocolates, en la boutique del modernismo.
Mientras, media cuadra para un lado, y media cuadra para el otro, esas familiares farmacias de barrio ya vende mucho menos shampoos que antes. La vida avanza. Sin importar cómo...
lunes, 21 de septiembre de 2009
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La vida es muy dinámica?
ResponderEliminarEl mundo sigue girando?
Aplican las dos, creo.
Besos
odio entrar a farmacity y que me obliguen a dejar mi cartera en el locker. AHÍ TENGO MI PLATA, LOCO.
ResponderEliminarLos barrios están desapareciendo. Tristemente.
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