jueves, 1 de octubre de 2009

Silencio

Riñón estaba ansioso por saber las novedades. Por eso, visitó a Páncreas en su caótica habitación. "Toc-toc"... "Pasá, trasplantable". "¿Cómo sabías que era yo?". "Nadie más viene a visitarme..."
Hubo un silencio. Incómodo silencio. La gente no se lleva bien con los silencios. ¿Qué tan malo son los silencios? ¿Por qué el pánico a los silencios? ¿Es necesario escuchar siempre?
-No aguantó más, contame como te fue.
Páncreas hizo un nuevo silencio. Prolongado. Sólo se escuchaba el ruido de unas ollas oxidadas y corroídas por el paso del tiempo y por menos lavados de lo aconsejable.
-Me voy, no se puede hablar con vos...
-... No fue.
-¿Cómo?
-No fue. Ella no fue. Me plantó. Me mandó un mensaje: "No voy". Y no dijo más...
-Uy... Qué lástima... ¿Y estás bien?
-Perfecto. Me compré 5 porciones de nachos y la peli estaba muy buena. Quiero ser cocinero..
Riñón no dijo nada. Páncreas tampoco. Nadie dijo nada. Cuando no hay nada que decir, lo mejor es no decir nada... Y quedaron en silencio.

1 comentario:

  1. Gran verdad: "cuando no hay nada que decir, lo mejor es no decir nada". Las palabras pueden estropear las cosas.

    A juzgar por como está Páncreas, se viene un desengaño amoroso en el próximo RG?

    Besos

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