jueves, 26 de noviembre de 2009

Felicidad

Páncreas, el tirano no tan tirano, iba y venía con su salud maltrecha. Carie mediante, Colmillo, el defensor de las buenas causas, había claudicado ante cualquier intento de justicia. Y Estómago, libre de toda libertad, tomó el poder de un cuerpo desauciado.
Citó una reunión de emergencia y dijo: "Acá habrá premios y castigos. Y empecemos con un juego. Todos sabemos que la felicidad completa no existe. Nadie es 24 horas feliz. Por eso, quiero una lista de los 10 pequeños momentos de felicidad de cada uno de ustedes. Yo evaluaré quien es más feliz. Elegiré un ganador, que tendrá un premio. El resto, castigos".
Silencio. Atronador silencio. Lengua se levantó y preguntó: "¿Vale haber saboreado un helado de dulce de leche?". Pupilas siguió: "¿Cómo cuenta haber visto un generoso escote?". Ombligo acotó: "¿Y a mí, que me rascaron hace poco dos veces seguidas?". Alma interrumpió a ano cuando este preguntaba por su última excursión al baño...
"Disculpeme, señor estómago. Coincido con que la felicidad completa es una falacia, pero queda claro con las dudas de todo el ser que los pequeños momentos pesan distinto según cada visión. ¿Cómo hará usted para...".
Estómago interrumpió: "Yo me encargo, muñeca... Así es la vida".

2 comentarios:

  1. Me encantó :)

    Creo que la felicidad es una cuestión de actitud, de cómo encaramos esos momentos (grandes o pequeños).

    Besos Caballero, espero con ansias el próximo RG!

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  2. .... Felicidad no tienes dueño...hoy conmigo y mañana por allá!!!!
    es lo que nos mantiene vivos, la búsqueda perpetua. EL dia que claudiquemos, es porque estamos muertos, o al menos, sin alma.
    saludos

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